miércoles, 6 de abril de 2011

Música destructiva.

Aprovechando una sospechosa baja laboral y con mis amigos Maik y Xon, alias el marmota del viaje, me apunté a un viaje de tres días a París. 20 años han pasado de mi única visita. Ciudad de las luces, que bien vale una misa, icono del centralismo francés. Todo muy grande.Entre las actividades culturales estuvimos en la tumba de Jim Morrison.

La de peña que había, fumando y recordando al baranda de los Doors.
Con el tiempo eso de vivir deprisa, morir rápido se me antoja un romanticismo. Pero este hombre lo tuvo y dejó muy buenas lisérgicas canciones. Un poeta acaso.

Light my fire
Back Door Man
Moonlight drive
Break on though (in the other side)
L.A. Woman
Hello, I Love You
Roadhouse blues
Unknow soldier
Riders on the storm
The End

Seguimos vivos para escucharle.